Festival ContraVisión Valladolid
Cero CheckPoints
Conciertos en apoyo a Palestina en repulsa a la celebración de Eurovisión en Israel
18 mayo, sábado, 19.30h
Plaza de Cantarranas
En respuesta al llamamiento hecho por artistas palestinxs para impedir
la celebración del Festival de Eurovisión 2019 en Israel y la campaña
#BDS (Boicot Desinversiones y Sanciones al Estado de Israel hasta que
cumpla con la legalidad internacional), y como denuncia al régimen
sionista que utiliza este Festival y la Cultura en todas sus
manifestaciones para lavar su imagen y normalizar el régimen de
ocupación ilegal, el apartheid, y el incumplimiento de los Derechos
Humanos, desde la Plataforma Solidaria con Palestina de Valladolid hemos
decidido sumarnos a dicho llamamiento, organizando el mismo día de
Eurovisión, 18 de mayo, de 19.30 a 23.00 en La Plaza de Cantarranillas el "Festival Valladolid ContraVisión. Cero Check Points".
El Festival contará con las actuaciones de:
La Sonidera Garbanza
Larah Fémina y Tisho
Carlos Soto y María Desbordes
Guille Jové
Las Perdidas
Presenta: Ley Mostaza
*
*
Larah Fémina y Tisho
Carlos Soto y María Desbordes
Guille Jové
Las Perdidas
Presenta: Ley Mostaza
*
MANIFIESTO CONTRAVISIÓN
El presente manifiesto ha sido elaborado por la Plataforma Solidaria con Palestina de Valladolid a partir del artículo de Jorge Ramos “Eurovisión sobre las ruinas de Palestina”, publicado en el diario digital “Público” el pasado 11 de mayo
En estos momentos se celebra la final de Eurovisión en Tel Aviv. Esta ciudad, capital del
Estado de Israel según el derecho internacional, fue fundada por colonos sionistas en
1909. Se emplazó inmediatamente al norte de Jaffa, una ciudad palestina habitada, según diversas investigaciones, desde el octavo y el quinto milenio a. C. Hasta 1948, Jaffa era la ciudad más poblada de Palestina y su capital cultural. Se trataba de un lugar donde se encontraban las sedes de asociaciones de mujeres palestinas, cines (como el famoso Alhambra), clubes deportivos, imprentas, periódicos como Falastin o sociedades culturales. También era un centro turístico, contaba con diversas industrias y era el núcleo del comercio de cítricos, que concentraba la mayor parte del valor de las exportaciones de Palestina. Incluso la vía del tren se introducía dentro del mar para facilitar el comercio. Pero según el relato mayoritario sionista, Palestina era un “país de desolación, sílices y cenizas”, una “tierra sin pueblo para un pueblo sin tierra”. En el caso de la población de Jaffa, entre el 13 y el 14 de mayo de 1948 unas 50.000 personas experimentaron allí la limpieza étnica solo por ser palestinas.
1948 fue el año de la Nakba (“catástrofe” o “desastre” en árabe) para el pueblo palestino, un annus horribilis. Antes de que se proclamase el Estado de Israel el 14 de mayo de aquel año, la limpieza étnica de Palestina que estaban llevando a cabo las tropas sionistas ya había supuesto la expulsión de entre 250.000 y 300.000 personas no judías. A finales de 1948, el número alcanzó alrededor de 750.000 palestinas y palestinos. Según las últimas investigaciones, en 1948 las fuerzas sionistas-israelíes destruyeron 615 localidades palestinas.
En estos momentos se celebra la final de Eurovisión en Tel Aviv. Esta ciudad, capital del
Estado de Israel según el derecho internacional, fue fundada por colonos sionistas en
1909. Se emplazó inmediatamente al norte de Jaffa, una ciudad palestina habitada, según diversas investigaciones, desde el octavo y el quinto milenio a. C. Hasta 1948, Jaffa era la ciudad más poblada de Palestina y su capital cultural. Se trataba de un lugar donde se encontraban las sedes de asociaciones de mujeres palestinas, cines (como el famoso Alhambra), clubes deportivos, imprentas, periódicos como Falastin o sociedades culturales. También era un centro turístico, contaba con diversas industrias y era el núcleo del comercio de cítricos, que concentraba la mayor parte del valor de las exportaciones de Palestina. Incluso la vía del tren se introducía dentro del mar para facilitar el comercio. Pero según el relato mayoritario sionista, Palestina era un “país de desolación, sílices y cenizas”, una “tierra sin pueblo para un pueblo sin tierra”. En el caso de la población de Jaffa, entre el 13 y el 14 de mayo de 1948 unas 50.000 personas experimentaron allí la limpieza étnica solo por ser palestinas.
1948 fue el año de la Nakba (“catástrofe” o “desastre” en árabe) para el pueblo palestino, un annus horribilis. Antes de que se proclamase el Estado de Israel el 14 de mayo de aquel año, la limpieza étnica de Palestina que estaban llevando a cabo las tropas sionistas ya había supuesto la expulsión de entre 250.000 y 300.000 personas no judías. A finales de 1948, el número alcanzó alrededor de 750.000 palestinas y palestinos. Según las últimas investigaciones, en 1948 las fuerzas sionistas-israelíes destruyeron 615 localidades palestinas.
Al norte de Jaffa-Tel Aviv, en el Centro Internacional de Convenciones Expo Tel Aviv, tiene lugar la gala de la final de Eurovisión. Este lugar está situado sobre las ruinas de la antigua localidad palestina de Al-Shaykh Muwannis, desalojada durante la Nakba. Más del 90% de las casas palestinas originales de Al-Shaykh Muwannis, en cuyo emplazamiento se celebra la final de Eurovisión 2019, han sido destruidas desde entonces hasta hoy. Incluso un cementerio palestino se ha visto afectado por las excavadoras. Una parte de la Universidad de Tel Aviv se encuentra sobre las tierras de este antiguo pueblo palestino borrado del mapa durante la Nakba.
Todavía hay más vínculos entre la Nakba y los lugares de Eurovisión 2019. Muy cerca de la antigua Ciudad Vieja de Jaffa, se halla estas semanas “Eurovision Village”. Es una zona lúdica y de actuaciones del festival a orillas del Mediterráneo. Se ubica en el parque Charles Clore, que a su vez se construyó sobre las ruinas del antiguo barrio palestino de Manshiya, perteneciente a Jaffa. Gran parte de las personas palestinas autóctonas de este barrio fueron expulsadas a lo que actualmente es Jordania, a la Franja de Gaza y Egipto. Nunca pudieron volver a sus casas originarias, como las más de 8 millones de personas palestinas refugiadas en la actualidad debido a que el Estado de Israel les ha negado y les niega el derecho al retorno reconocido por la Resolución 194 de la Asamblea General de la ONU
Porque la Nakba no solo es un acontecimiento del pasado. La Nakba es un “presente eterno”. El pasado fin de semana entre el 3 y el 5 de mayo de 2019, el ejército israelí acabó con la vida de 31 personas palestinas en la Franja de Gaza. Desde el año 2000, las fuerzas y colonos israelíes han asesinado a más de 2.000 niñas y niños palestinos. Israel ha sido condenado oficialmente por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en más ocasiones que ningún otro Estado del mundo. En marzo de 2017, un informe de un organismo de la ONU declaró que Israel es un Estado de apartheid y que el BDS es una herramienta legítima para que se cumpla con el derecho internacional en Palestina-Israel. Cabe recordar que, según el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, el apartheid es un crimen de lesa humanidad. Como recuerdan más de un centenar de artistas de Palestina, más de 100 organizaciones LGBTQIA+ de todo el mundo (incluyendo del Estado español), más de 25 artistas israelíes, grupos BDS de distintos continentes o festivales de música, Eurovisión 2019 está perfectamente planificado por las autoridades israelíes para intentar limpiar la cara, blanquear la imagen y ocultar crímenes a través del “artwashing” y del “pinkwashing”. Este año, Eurovisión es, precisamente, “La Venda” que el Estado de Israel intenta colocar al resto del mundo. Una venda ante la Nakba que no se acaba. Una venda ante las ruinas del pasado y del presente.
Todavía hay más vínculos entre la Nakba y los lugares de Eurovisión 2019. Muy cerca de la antigua Ciudad Vieja de Jaffa, se halla estas semanas “Eurovision Village”. Es una zona lúdica y de actuaciones del festival a orillas del Mediterráneo. Se ubica en el parque Charles Clore, que a su vez se construyó sobre las ruinas del antiguo barrio palestino de Manshiya, perteneciente a Jaffa. Gran parte de las personas palestinas autóctonas de este barrio fueron expulsadas a lo que actualmente es Jordania, a la Franja de Gaza y Egipto. Nunca pudieron volver a sus casas originarias, como las más de 8 millones de personas palestinas refugiadas en la actualidad debido a que el Estado de Israel les ha negado y les niega el derecho al retorno reconocido por la Resolución 194 de la Asamblea General de la ONU
Porque la Nakba no solo es un acontecimiento del pasado. La Nakba es un “presente eterno”. El pasado fin de semana entre el 3 y el 5 de mayo de 2019, el ejército israelí acabó con la vida de 31 personas palestinas en la Franja de Gaza. Desde el año 2000, las fuerzas y colonos israelíes han asesinado a más de 2.000 niñas y niños palestinos. Israel ha sido condenado oficialmente por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en más ocasiones que ningún otro Estado del mundo. En marzo de 2017, un informe de un organismo de la ONU declaró que Israel es un Estado de apartheid y que el BDS es una herramienta legítima para que se cumpla con el derecho internacional en Palestina-Israel. Cabe recordar que, según el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, el apartheid es un crimen de lesa humanidad. Como recuerdan más de un centenar de artistas de Palestina, más de 100 organizaciones LGBTQIA+ de todo el mundo (incluyendo del Estado español), más de 25 artistas israelíes, grupos BDS de distintos continentes o festivales de música, Eurovisión 2019 está perfectamente planificado por las autoridades israelíes para intentar limpiar la cara, blanquear la imagen y ocultar crímenes a través del “artwashing” y del “pinkwashing”. Este año, Eurovisión es, precisamente, “La Venda” que el Estado de Israel intenta colocar al resto del mundo. Una venda ante la Nakba que no se acaba. Una venda ante las ruinas del pasado y del presente.
¡No te lo puedes perder, te esperamos!
*
Reseña en Último Cero de la convocatoria:
Valladolid se suma al boicot a Eurovision en apoyo a Palestina con el festival ContraVision - Cero Check Points
La
Plataforma Solidaria con Palestina de Valladolid organiza un festival
solidario el 18 de mayo en la Plaza de Cantarranas con las actuaciones
de Carlos Soto y Maria Desbordes, Guille Jové, Larah Fémina y Tisho, La
Sonidera Garbanza, Las Perdidas y Ley Mostaza
Crónica de Último Cero del concierto:
Palestina gana el Festival ContraVisión
La Plataforma Solidaria con Palestina de Valladolid organizó en la plaza de Cantarranas de Valladolid el festival con las actuaciones de Las Perdidas, Carlos Soto y Maria Desbordes, Larah Fémina y Tisho, La Sonidera Garbanza y Guille Jové y su banda
Crónica de Último Cero del concierto:
Palestina gana el Festival ContraVisión
La Plataforma Solidaria con Palestina de Valladolid organizó en la plaza de Cantarranas de Valladolid el festival con las actuaciones de Las Perdidas, Carlos Soto y Maria Desbordes, Larah Fémina y Tisho, La Sonidera Garbanza y Guille Jové y su banda
Plataforma Solidaria con Palestina de Valladolid
2008-2018 Diez años solidarios
Twitter: https://twitter.com/VallaPalestina, @VallaPalestina
Contra la injusticia y la impunidad
Firma #YoNOComproApartheid
http://boicotisrael.net/yonocomproapartheid/
Firma #YoNOComproApartheid
http://boicotisrael.net/yonocomproapartheid/